INFORME ANUAL 2014 | LA DIVINA COMEDIA

SISTEMA DE INFORMACIÓN SOBRE AGRESIONES CONTRA DEFENSORAS Y DEFENSORES DE DERECHOS HUMANOS EN COLOMBIA SIADDHH

Colombia entró en la senda del conflicto armado por una razón de fondo: nunca ha sido un Estado garantista de los derechos humanos. Históricamente sus clases gobernante atornilladas en los partidos tradicionales, excluyeron de la participación política a los sectores que no se sometían a los dos partidos hegemónicos. No respetó los pactos con las guerrillas que antaño depusieron las armas. Tan pronto se desmovilizaron, sus líderes fueron asesinados por las fuerzas militares y policiales con uniforme o encubiertos. Los campesinos, indígenas y afrocolombianos siempre fueron vistos como sectores menores y sin derechos. El presupuesto que quedaba luego del saqueo de la clase gobernante solo se invertía en las grandes ciudades, dejando las regiones lejanas y fronterizas a sol y agua, que se “ordenaran como pudieran” y quedando finalmente en manos de poderes reales.

Hoy, seis décadas después, el gobierno nacional y las guerrillas se encuentran en un proceso de diálogo para cerrar el capítulo del conflicto armado y entrar en la senda de la democracia con base en un Estado garantista de derechos.

Pero cerrar el capítulo del conflicto armado, implica muchos retos, especialmente desde la institucionalidad que debe hacer las reformas necesarias para cauterizar las causas que lo desataron. Además de ello, es fundamental que el gobierno y Estado colombiano sean capaces de reconstruir la desconfianza existente por su histórica incapacidad de proteger la vida e integridad de quienes creyeron en su palabra.  Eso implica que, desde hoy, la normatividad, los mecanismos e instituciones responsables de la protección funcionen de manera idónea, eficiente y ética, para comenzar a cimentar las bases sólidas de la futura protección en un posible contexto de post conflicto. Si el gobierno nacional, con su liderazgo en el proceso de paz, no logra consolidar esa perspectiva, desde ya se está marcando una fisura preocupante.

En ese sentido, debemos reconocer los avances, los esfuerzos gubernamentales y resultados alcanzados para proteger el mayor número de defensores/as, líderes sociales, políticos de oposición, periodistas, sindicalistas y demás sectores, en riesgo de ser agredidos. Sin embargo, diferentes hechos registrados por medios de comunicación y conocidos de primera fuente por el Programa Somos Defensores durante el 2014, comenzaron a erosionar esa ruta trazada en materia de protección, generando preocupación por razones de fondo y de forma.

El presente Informe, elaborado con base al seguimiento de la política en materia de protección y las agresiones contra líderes, defensores y defensoras de derechos humanos registradas por el Sistema de Información del Programa Somos Defensores – SIADDHH; da cuenta de los diferentes problemas y males que se fueron tomando a la Unidad Nacional de Protección, UNP, entidad creada para coadyuvar sustancialmente en garantizar la vida e integridad de quienes se encuentren amenazados(as) o en riesgo de ser agredidos(as).

Para dar cuenta de ese panorama y tratar de hacer digerible esta pesada temática, recurrimos a hacer un símil del poema La Divina Comedia de Dante Alighieri, guardando todas las proporciones. Ordenar tan disímiles acontecimientos e información recopilada no era posible sin una ruta bien trazada como esta extraordinaria obra de la literatura universal.

Para alcanzar el objetivo de hacer comprensible el volumen de información, el documento está conformado por tres capítulos: El Infierno: dividido en 9 círculos, cada uno recoge las diferentes problemáticas enfrentadas por los defensores/as y líderes sociales cuando recurren a la UNP en busca de protección; las dificultades para el cumplimiento de las medidas, de quienes ya cuentan con ellas; el caos al que llegó la institución por falta de recursos y desorden administrativo; las fallas fatales de la UNP en la protección; el cáncer de la corrupción que invade a la entidad; el manejo corporativo desde la dirección de la institución que permitió ocultar lo que allí pasaba y por último, el colapso del actual modelo de protección enfocado en lo material, individual, privatizado y tercerizado.

El capítulo 2, El Purgatorio, recoge las cifras de agresiones contra líderes, defensores(as) de derechos humanos durante el 2014.  Como es costumbre, se presentan los perfiles generales de estas personas que entregaron sus vidas en el ejercicio de su labor, como un reconocimiento. También se hace un análisis detallado del tipo de agresión, afectación por género, presuntos autores, regiones más afectadas y demás. Pero dado el crecimiento exponencial del “fenómeno” de amenazas a través de panfletos y vía internet, se hace un análisis pormenorizado de las mismas El capítulo 3, El Paraíso, donde se recogen algunas propuestas que contribuyan a repensarnos cómo mejorar la política existente en materia de protección, luego del recorrido preocupante de los capítulos anteriores. Dada las obligaciones internacionales contraídas por Colombia, en este aparte se recuerdan algunas recomendaciones recientes hechas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, CIDH, en materia de protección. Por último, las Conclusiones propias de este Informe anual.

Finalmente, y antes de empezar este viaje, agradecer a todas las organizaciones articuladas a la Plataforma de derechos humanos Coordinación Colombia Europa Estados Unidos CCEEU, al Movimiento de Víctimas de Crímenes de Estado MOVICE y demás organizaciones de derechos humanos y sociales, de afrodescendientes, campesinas, jóvenes, indígenas, de mujeres, culturales y sindicales por el apoyo con información veraz y oportuna para el seguimiento a los casos de agresión. Igualmente, un agradecimiento muy especial a la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones para los Derechos Humanos en Colombia OACNUDH. Y como siempre, a las agencias de cooperación como MISEREOR, Diakonía Suecia, OXFAM Intermon, Amnistía Internacional, Terres des Hommes Basilea, Terres des Hommes Suisse. Por último, a las Embajadas de Noruega y Canadá, un agradecimiento especial por su apoyo a nuestro trabajo. Así las cosas, empecemos este viaje por “La Divina Comedia”.